la oscuridad de mi alma,
el sombrío manto que entorpecía mi vida,
se ha ido amor primero.
pues ha llegado un distinto
y soleado sendero.
te contare en este día de ensueño,
que me equivoque al haber creído,
que eras mi amor eterno.
pues ha llegado un amor real,
tan y real y verdadero,
como las flores del campo en invierno.
un amor tan resistente y abrumador
que con un par de miradas
se ha llevado aquellas noches desveladas,
aquellas noches sin estrellas,
en las que mi cuerpo rogaba
sentir tu presencia,
sus manos han curado,
las grietas de mi alma,
han sanado mi esperanza.
de volver a sonreír
me ha dado las fuerzas para seguir.
hoy me despido sin animo de llorar,
mas no te voy a reprochar,
cada noche de dolor,
pues lo que mi amor por ti me enseño,
hoy me sirve para amar y ser mejor.
ser realista y vencedor,
saber que amar sin recibir nada a cambio.
no es en vano,mas regala peldaños
para saber que,
cuando uno ama con el alma,
mas allá de no recibir nada a cambio,
lleva consigo en su haber,
la mas grata recompensa,
que ha sabido amar,
esperar e imaginar,
mas nadie podra jamas negar
cuan grato es su existir.
porque al amar,
uno estampa su vida,
en el libro del sentir.
mas son pocos los que se animan al vivir,
la gracia de sentir,
el amor en sus venas y morir por amor.